Cuando aprendes a tocar y a sentir, te fijas en que los genitales no son las partes exclusivamente más eróticas del cuerpo. Aquí te mostraremos toda esa geografía erógena que estarás encantado de explorar
Por HotSweetHome
La imaginación de proyectar el deseo que se siente hacia otra persona, resulta ser el estímulo más eficiente para desatar un encuentro sexual lleno de placer y erotismo. Debes aprender que no solo se consigue un placer inmenso en la penetración, también es importante que aprendas cómo tocar el cuerpo de tu pareja, para hacerla entrar en calor, hasta verla estremecerse.
Un buen beso o caricia en la zona más sensible de esa persona que tanto te gusta, puede llevarte a descubrir el placer de la sensación más erótica que pueda sentir él o ella, sin la necesidad de llegar al roce de los genitales de ambos. Esto se debe a que se logra dar con las partes más eróticas del cuerpo del hombre o la mujer.
¿Cuáles son las partes eróticas?
Mujeres
Aparte de los genitales, el cuello, la nuca, las orejas, los pezones, el trasero y los músculos inferiores de las mujeres, son las áreas de mayor sensibilidad y que las hace temblar sólo con un delicado y sensual toque.
Hombres
En el caso de los hombres; el pene, el perineo, la parte inferior de los muslos, sus labios y acariciar su cuello y espalda, los hace entrar en calor rápidamente, desatando en ellos esa fiera salvaje que no deseas domar.
¿Qué hacer en estas zonas?
Tu imaginación es la única que te guiará a tocar y besar de manera ardiente cualquiera de estas partes, solo déjate llevar y atrévete a experimentar sensaciones que sólo tú y esa persona ideal están dispuestos a descubrir en la intimidad.
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