No todos los orgasmos se dan con la misma intensidad sino que son variables
Por HotSweetHome
@hotsweethome_
El placer no se consigue fácilmente, no todas las personas que besen y rocen nuestro cuerpo, causan orgasmos. Todo se experimenta de manera diferente y en lugares jamás imaginados. Cuando la adrenalina se vuelve protagonista del momento, las almas se liberan y el placer es indescriptible.
Mientras se siente el cosquilleo entre las piernas, el nivel de excitación aumenta, pidiendo a gritos una estimulación oral o una penetración que ocasione más pasión en la pareja.
En las mujeres
Las áreas altamente sensibles y erógenas pueden llevar a provocarte orgasmos explosivos, si le das la estimulación correcta. Esta se dispara o aumenta a través del roce, el sexo oral, el uso de juguetes sexuales (un vibrador o succionador de clítoris) o ciertas posturas que favorecen el frote del pubis, como la posición del “misionero”.
La estimulación correcta del clítoris, es el camino directo hacia el orgasmo. Es un órgano diseñado para satisfacer las necesidades sexuales de la mujer, gracias a sus 8.000 terminaciones nerviosas. Según un estudio publicado en “NeuroQuantology”, la sensación es localizada, aguda, potente y de corta duración.
En los hombres
Los orgasmos masculinos se producen en dos fases: la primera, cuando se acumula el esperma en la uretra posterior, con la erección proveniente del estímulo sexual, y la segunda con esa descarga o expulsión del semen. Durante la expulsión del esperma, el hombre siente la sensación de placer intenso.
Los hombres son más rápidos al momento de eyacular. Además de poder hacerlo en cualquier posición, también se experimentan de manera diferente.
La masturbación anal es una práctica sexual habitual que no solo ocurre entre los hombres que tienen sexo con otros hombres. La realidad es que es un acto que cada vez va teniendo más seguidores, tanto los homosexuales como los heterosexuales disfrutan recibiendo estimulación y orgasmo anal.