Lubricar no es tan sencillo de lograr, cuando la mujer se encuentra en un estado de trastornos de estrés y depresiones
Por HotSweetHome
La poca o nula lubricación de la mujer, no sólo es a causa de menopausia, ciertas patologías, medicamentos o desajustes hormonales; el estrés y la depresión, también se suman a las causas de esta incomodad que puede afectar a cualquier mujer de diversas edades en su vida íntima y sexual.
Este trastorno emocional del estrés y la depresión, en ciertas circunstancias pueden afectar la lubricación vaginal, evocando poco apetito e interés sexual, tras no sentirse cómoda y normal consigo misma. Por ello, esto se considera una razón para acudir a especialistas en aras de buscar soluciones y que la condición no pase a daños mayores como infecciones o atrofias en la zona vaginal.
¿Cuándo se llega a esta conclusión?
Aunque aún no es certera, cuando la mujer siente irregularidades acude por creencia de que sea algo dañino, siendo los resultados negativos para cualquier grave problemática, y positivos para las condiciones emocionales. Los especialistas suelen realizar una evaluación completa para descartar cualquier posible afecto inadecuado.
Especialistas del tema hacen hincapié en que la falta de lubricación, no siempre es dañina y que acudir al ginecólogo puede prevenir infinidades de molestias vaginales.
Otras causas que pueden ser una mala higiene, infecciones vaginales, la menopausia y desorden hormonales en la menstruación o durante la lactancia, para los hay tratamientos efectivos.
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